Lápiz en papel Esquisse
29,7 x 21 cm
Iglesia que permanece del conjunto monástico del siglo X ya desaparecido, donde compartieron sede los obispos de Aragón hasta que hubo obispado en Jaca. Fue catedral de Aragón y en ella se encuentran los sepulcros de tres obispos.
El templo es consagrado hacia el año 1104 por el obispo Esteban de Huesca.
Cuenta con una nave única, rematada en ábside semicircular al este que se decora al exterior con arcuaciones lombardas, dos lesenas marginales y otras dos mediales que configuran tres segmentos centrados por sus respectivos ventanales.
A pesar de su evidente acabado formal lombardista, comparte rasgos conceptuales del románico pleno como es el caso de la escultura integrada.
Dispone de dos portadas, una en el muro este y otra en el sur. Ambas se hallan bajo el nivel del actual terreno y fue necesario construir sendas cajas de escalera pétrea para acceder al templo. Una torre adosada al muro norte le da cierta similitud a la ermita de Iguacel.
El muro sur aloja en cuerpo adelantado la bella portada jaquesa.
Debido a su ubicación en la confluencia de dos barrancos, la ermita se encontraba soterrada y tan solo era visible su parte superior. En el año 1962, ICONA procedió a su desescombro y emegió en un magnífico estado de conservación.
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